Luciendo un vestido estampado en blanco y negro con un importante escote, Lindsay Lohan volvió a ponerse en la piel de la mítica Marilyn Monroe.
La protagonista de Mean Girls brilló con una peluca rubia y un imponente vestuario en la sesión de fotos, que se divulgarán en Vogue España.
Lohan, centro de la polémica en las últimas semanas, acaba de tatuarse en la muñeca una de las citas de Monroe: “Todo el mundo es una estrella y se merece brillar”.
La polémica joven no disimula su admiración por la legendaria actriz y, en el pasado, llegó a comprarse un departamento donde una vez vivió.
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